Fauna de Animación – Suzumiya Haruhi no Yuutsu
Vamos a echarle un vistazo a los animales que aparecen en una de las series de anime más popular de todos los tiempos, un verdadero clásico. No es cualquier serie. Os hablo de «Suzumiya Haruhi no Yuutsu» («La melancolía de Haruhi Suzumiya»), una comedia estudiantil basada en una serie de novelas ligeras que ha sido aclamada por la crítica y los otakus, tanto orientales como occidentales.

Una comedia estudiantil sin igual
La protagonista indiscutible es Haruhi Suzumiya (Ja-rú-ji Su-zu-mí-ya). Es guapa, inteligente, descarada y excéntrica como ella sola. Está aburrida de la normalidad del mundo que le rodea, y desde su primer día en la Escuela Preparatoria dejó muy claro su deseo de establecer contacto con aliens, viajeros del tiempo y personas con poderes paranormales. Y como no estaba dispuesta a esperar a que vengan a ella, creó la Brigada SOS, un club extraescolar destinado a contactar con aliens, viajeros del tiempo y personas con poderes paranormales para divertirse con ellos.
Su compañero Kyon fue quien le dio involuntariamente a Haruhi la idea de crear el club, y acabó sometido sin comerlo ni beberlo a los deseos de Haruhi y compartiendo sus aventuras. Él será el narrador de la serie.

Kyon – ¿Ayudarte a qué?
Haruhi – A fundar mi nuevo club.
Lo que Haruhi no sabe es que ella misma es un ser omnipotente capaz de modificar la realidad según su estado de ánimo, e incluso destruir su propio universo y volver a recrearlo a su gusto de la noche a la mañana. Ella no es consciente de su gran poder, pero hay facciones en el universo muy interesadas en estudiar, vigilar y controlar a Haruhi. La estabilidad del universo está en juego, así que mientras ella esté contenta y entretenida todo irá bien. Por eso mismo, Haruhi acaba rodeada sin saberlo de los personajes que andaba buscando:



La misión de todo ellos es muy simple: vigilar a Haruhi Suzumiya y mantenerla contenta para que no decida reiniciar el universo de un día para otro. El único problema es que ninguna de las facciones que estudian a Haruhi había contado con que esta se interesaría por un tipo normal como Kyon.

Y más o menos así empiezan las aventuras de la Brigada SOS, liderada por la única y alegre Haruhi Suzumiya. Si no habéis visto la serie, vedla porque os aseguro que no tiene desperdicio. Y si como yo la habéis disfrutado, dadle un nuevo repaso.
Animales de «Suzumiya Haruhi no Yuutsu»
Unos cuantos animales se han visto involucrados de un modo u otro en las peripecias de esta chica y su pandilla, y los vamos a ver a continuación.
Recién fundada la Brigada SOS, a Haruhi se le ocurrió nada menos que repartir propaganda del club en la puerta del instituto, vestida al más puro estilo conejita de Playboy. Y lo peor es que no se conforma con hacerlo solo ella misma y arrastra a la pobre y tímida Mikuru-chan. Una prueba irrefutable de que a Haruhi le importa muy poco la opinión de los demás.

Los conejos (Oryctolagus cuniculus) son mamíferos lagomorfos que son conocidos desde antiguo por su proverbial fecundidad y veloz reproducción. Difícil es saber lo que se le pasa por la cabeza a un conejo macho cuando ve a una conejita, pero imagino que las hormonas le harán sentir de todo menos calma y tranquilidad.

En cierta aventura, la Brigada SOS debe entrar en una dimensión aislada provocada indirectamente por Haruhi y enfrentarse a un enemigo insólito: un grillo de tamaño colosal venido del otro extremo del universo.


Salvando el tamaño, este bicho parece ser un grillo camello, todos miembros de la familia Rhaphidophoridos. A este tipo especial de ortópteros se les reconoce muy bien por su cuerpo arqueado, así como por la extrema longitud del tercer par de patas y las antenas dedicadas a orientarse en ambientes nocturnos o lugares con pobre iluminación, como las cuevas.
Además, puedo añadir que se trata de un macho. Las hembras portan un oviscapto (o aparato ovipositor) en forma de espada al final del abdomen, que utilizan para perforar el suelo y depositar los huevos a cierta profundidad.

En el arco «Agosto Infinito» (que dura ocho largos y repetitivos episodios 🥱) Haruhi propone realizar una serie de actividades propias del verano para pasárselo bien con sus compañeros durante la segunda quincena de agosto, antes del reinicio de las clases en septiembre.

Haruhi propone, entre otras cosas, visitar un festival O-bon llevando el vestuario típico. Dicho y hecho. A Mikuru le apetece acercarse a uno de los puestos del festival a atrapar peces dorados, algo a lo que la jefa de brigada no tiene inconveniente.


Los carpines dorados (Carassius auratus), también llamados «goldfish» o peces dorados, son peces de agua dulce de la familia Ciprínidos muy apreciados entre los amantes de la acuariofilia. Son conocidos desde antiguo por su belleza y resistencia, y hoy en día existen multitud de variedades de esta especie a disposición de los aficionados. En «AdenofreakTP» hemos hablado de ellos, de la enfermera Joy y su capacidad de reproducirse mediante ginogénesis.

Otra actividad estival que se le antojó a Haruhi fue salir al bosque a cazar cigarras bajo el Sol veraniego, una afición muy popular entre los niños japoneses.


Las cigarras son insectos de la familia Cicádidos que pertenecen al orden Hemípteros, junto a sus familiares las chinches y las notonectas. Son famosas por las largas serenatas que interpretan con sus órganos estriduladores durante los cálidos días de verano, como uno de los principales símbolos del calor estival. En Japón son especialmente abundantes y unas cuantas especies se encuentran allí viviendo y cantando en verano.

Además de cigarras, los niños nipones son también muy aficionados a los escarabajos, sobre todo al kabuto mushi o escarabajo rinoceronte japonés (Tripoxylus dichotomus). Les encanta salir al bosque a capturar los mejores machos para luego hacerlos luchar como si de Pokémon se tratasen.
Pero lo que Yuki Nagato se encontró mientras buscaba cigarras no era un kabuto mushi, si no algo mucho más raro y valioso: un flamante macho de escarabajo Hércules (Dynastes hercules).


Este impresionante coleóptero se cuenta entre los insectos vivientes de mayor tamaño y vive en los bosques lluviosos de América Central y del Sur donde sus larvas se alimentan taladrando los troncos de los árboles. No sé qué pintaría este Hércules en un bosque japonés, pero el caso es que ahí está. Quizá sea cosa de los poderes de Haruhi.

De vuelta a las clases, los estudiantes de secundaria comienzan a preparar el Festival Cultural del Instituto con una serie de eventos, como obras de teatro, conciertos o un Maid-Café. Haruhi no quiere quedarse atrás y se le ocurre que la Brigada SOS debía preparar algo grande, nada menos que una película amateur.

El título de la película: «Las Aventuras de Mikuru Asahina Episodio 00», y estaría protagonizada por la pobre Mikuru-chan y dirigida, producida y escrita por la misma Haruhi. De su argumento, mejor no hablemos. Los diálogos fueron escritos sobre la marcha en carteles que los actores debían leer. Todo era pura improvisación fruto de la calenturienta mente de Haruhi.

En cierto momento del rodaje, le pareció una buena idea rodar una secuencia en la que Mikuru-chan apareciese rodeada de palomas. Las palomas que se ven por las ciudades de todo el mundo son palomas bravías (Columba livia), un miembro representativo del orden Columbiformes.

Haruhi no podía conformarse con unas simples palomas. Eso era demasiado normal y aburrido. Le hubiera gustado contar con una bandada de palomas blancas para la película, y los extraños poderes de su subconsciente hicieron el trabajo por ella. Al día siguiente, las mismas palomas se habían vuelto completamente blancas. Así y todo siguen perteneciendo a la especie Columba livia solo que en su variedad leucista.

Lo mejor fue cuando unos días después las mismas palomas se convirtieron en una especie de paloma mucho más rara y exótica. Tan rara como la paloma migradora (Ectopistes migratorius), una especie extinta desde principios del siglo XX.

La historia de estas aves representa uno de los ejemplos más dramáticos de extinción de una especie debida a la precisión y barbarie con la que podemos llegar a actuar los humanos. La paloma migradora vivía en grandes bandadas de miles de millones de individuos que viajaban de costa a costa de Norteamérica tapando la luz del Sol a su paso. Fueron cazadas como fuente de plumas y carne a bajo precio, al mismo tiempo que los bosques donde establecían sus colonias de cría eran talados para roturar nuevos campos de cultivo.


Eran miles de millones. Y fueron acorraladas hasta provocar su extinción, cuando la última paloma migradora murió en cautividad en 1914. Ahora solo nos queda la vaga esperanza de que algún día las técnicas genéticas permitan devolverla a la vida, lo cual dudo.
Volviendo al tema, nos queda citar al gato que Haruhi insistió en incluir en su película. Puesto que Yuki hacía de villana de turno y era una bruja, la directora opinó que toda bruja debería tener un gato como compañero animal. Los gatos domésticos (Felis silvestris catus) son mamíferos carnívoros de la familia Félidos.


Pero este no es un gato corriente. Como luego se descubre, cuando el gato se pone a hablar con voz masculina gracias a que el subconsciente de Haruhi así lo quiso, este gato está fuera de lo común por tratarse de un gato tricolor y además ser un macho.

¿Y eso? ¿Por qué es tan raro ver un gato macho y tricolor? Tal y como os comenté en «Maneki Neko, el gato que saluda«, los gatos tricolor son casi en su totalidad hembras debido a que el gen que determina el color de las manchas se encuentra en el cromosoma sexual X, por lo que tan solo en un ejemplar XX (vamos, una hembra) pueden reunirse a la vez las variantes alélicas negra y naranja del gen.
Por el contrario, para que en un macho se den los dos colores en sus manchas deben darse tal serie de casualidades que la proporción de gatos macho y tricolor es de 1 por cada 3000 hembras tricolor. Son posibles, pero raros de narices.
Hasta aquí llega la fauna de «Suzumiya Haruhi no Yuutsu». He disfrutado mucho haciendo este análisis y espero haber podido contentar tanto a otakus como biólogos. No será la última serie de anime que aparezca en «AdenofreakTP».