Fauna de “La Princesa Sofía” I – Glires y carnívoros

Vamos a empezar con los mamíferos. En esta primera entrega de la La Fauna de «La Princesa Sofía», veremos a todos los mamíferos carnívoros y a los roedores y sus semejantes, desde conejos hasta ardillas.

Glires – Lagomorfos

Primero hay que hablar de Clover, que es el mejor amigo de nuestra princesa. Clover (que significa «trébol» en inglés) es un conejo europeo (Oryctolagus cuniculus), la especie de lagomorfo más extendida por todo el mundo y la única domesticada por los humanos.

– Eh, ¿no sabes lo que es el espacio personal? Suéltame.
– Oh, perdona. Es que eres tan mono que no he podido contenerme.
– Pues, por favor, contente. (2)

Los lagomorfos y los roedores son dos órdenes de pequeños mamíferos muy relacionados evolutivamente que se engloban dentro del clado Glires. Ambos tipos de animales cuentan con incisivos de crecimiento continuo recubiertos de esmalte y deben mantener su tamaño mediante un incansable desgaste (de ahí que estén todo el día royendo). Sin embargo, los conejos y sus afines tienen dos pares de incisivos superiores, mientras que las ratas y los suyos sólo tienen un par.

Desde la domesticación del conejo europeo, se han creado numerosas razas y variedades de conejos domésticos, ya sean como ganado, como mascota o para su uso en investigación. Por ejemplo, Ginger es una conejita leucista de concurso con un pelaje «más blanco que la nieve más blanca», como dice la princesa Amber.

«Y además sin nudos en el pelo que cepillar, y sabe silbar.» (1)

Y también está Don Mimoso, el conejo de un ilusionista que decidió huir de su dueño para alejarse del estrés del mundo del espectáculo. Este es de alguna raza de pelaje manchado.

Clover y Don Mimoso. Clover es un poco más cabezón y tiene los ojos más grandes para hacerlo más expresivo, pero son de la misma especie. (3)

Glires – Roedores

Otro de los amigos animales de la princesa Sofía es Whatnaught, una ardilla roja (Sciurus vulgaris) de pocas palabras que no dice nada de nada, a pesar de que nuestra protagonista habla con los animales.

Los amigos animales de nuestra princesita: Clover, Whatnaught y un par de pájaros que veremos más adelante. (4)

Los roedores se clasifican tradicionalmente en varios subordenes que se diferencian por las inserciones de los músculos mandibulares, un detalle anatómico muy importante pero que sólo puede apreciarse con un examen detallado del cráneo y la mandíbula inferior. Las ardillas representan al suborden Sciuromorfos, donde también entrarían los lirones y los perritos de la pradera.

Como buena princesa Disney, Sofía puede atraer con su voz a los animales del bosque: zorros, mofetas, conejos y un par de ardillas. (5)

La ardilla gris (Sciurus carolinensis) es la especie hermana de la ardilla roja pero es de distribución norteamericana. Esta se estaba comiendo tranquilamente una bellota sobre un tronco, hasta que llegó Sofía recogiendo leña para acampar y la molestó.

«¡Qué tranquilidad! Ya verás como viene alguien a fastidiarme el momento.» (6)

Un par de ratones (Mus musculus), que son transformados mágicamente por la brujita Lucinda en trovadores, son la representación del suborden Miomorfos, donde también entrarían ratas y hámsteres. Se encuentran tan extendidos o aún más que los conejos y son usados de la misma manera como mascota y en investigación.

Dos ratones y una rana. (7)

Carnívoros – Caniformes

El príncipe James, el nuevo hermano de nuestra pequeña Sofía, tiene un perro que es su mejor amigo y su mascota predilecta. Su nombre es Rex y pertenece a la subespecie Canis lupus familiaris, como todos los perros. En cuanto a la raza, creo que puede ser un «Pointer inglés», una raza de perro «cobrador» utilizada por los cazadores para recoger las piezas abatidas.

El nombre del perro muy original no es. (8)

Dentro del gran orden de los mamíferos Carnívoros existen dos subórdenes que se separaron desde hace 50 millones de años, por lo menos, y desde entonces han evolucionado como linajes independientes. Uno de ellos son los Caniformes, y el perro es su miembro más característico.

Al igual que pasaba con los conejos, la domesticación humana también ha dado como resultado una multitud de razas distintas de perros, cada una de ellas enfocada a una tarea específica. Por ejemplo, en la aldea del castillo hay un niño con un galgo o lebrel, un perro de una raza hecha para perseguir a gran velocidad, precisamente, conejos.

El niño del lebrel. (1)

Los «Basset-hound», como el de esta niña con una cola igual a la de su perro, son otra raza canina que gracias a su agudo olfato, se utilizaba como sabueso o «perro levantador» para hacer que las aves escondidas entre la maleza levanten el vuelo. 

Un perro travieso y una niña que mueve la cola. (7)

Dentro del suborden Caniformes, existen varias familias diferentes. La mejor conocida es la familia de los Cánidos, de la cual el perro es la especie tipo. En «La Princesa Sofía» también aparecen otros miembros de esta familia, como esta madre con sus cachorros, que son zorros rojos (Vulpes vulpes).

Podríamos decir que es una auténtica zorra, y no nos equivocaríamos. (5)

Estos carnívoros oportunistas, tan comunes en el continente europeo, son monógamos y los grupos familiares suelen estar formados por una pareja estable, tres o cinco cachorros jóvenes y alguno de los cachorros de la anterior camada, que se queda con sus padres para ayudar a sacar adelante a la siguiente generación.

Estos zorros ayudaron a Sofía a encontrar a su padre cuando se perdió en la ventisca. (9)

Otra familia dentro del suborden Canimorfos es la de los Úrsidos. Además de los zorros, entre los animales del bosque que ayudaron en la búsqueda del padre de Sofía, estaba un enorme oso pardo que probablemente fuera de la subespecie europea, Ursus arctos arctos. Los osos acostumbran a hibernar durante el invierno, aunque a veces se despiertan con hambre y salen a buscar algo de comer o, como en este caso, ayudar a una princesita en apuros. Después de estirar las piernas, vuelven a sus refugios para echarse de nuevo a dormir.

– Mira, mamá. Parece que los trotamúsicos saben dónde está papá.
– Pero, ¿esos no iban con un burro y un gallo? (9)

La princesa Hildegard tiene un visón leucista como mascota, otro integrante del suborden Canimorfos, pero esta vez de la familia Mustélidos, en la que también entrarían los hurones, los armiños y las nutrias.

Hildegard, con su visón blanco en brazos. (10)

No es raro encontrar a visones viviendo como animales de compañía, aunque hay que aclarar que siempre serán de la especie americana (Neovison vison), criada también a gran escala por su piel. En cambio, el visón europeo (Mustela lutreola) se encuentra en peligro de extinción y, por tanto, su tenencia en cautividad está prohibida por ley.

Hubo una época en la que las mofetas (Mephitis macroura) y sus parientes también se clasificaban en la misma familia de los visones, hasta que se consideró el apartarlas y formar con ellas una nueva familia, los Mefítidos.

Una familia de mofetas dándose un baño. (5)

Carnívoros – Feliformes

El otro suborden de los mamíferos carnívoros son los Feliformes, donde se agrupan los gatos y otros depredadores evolutivamente relacionados, como las hienas y las mangostas. En «La Princesa Sofía» únicamente está representado por la familia Félidos.

Todos los félidos se caracterizan por ser depredadores altamente especializados, de hocico corto y garras retráctiles que pueden ser envainadas cuando no están en uso, excepto los guepardos. Se dividen en dos subfamilias; por un lado están los Felinos, como el gato doméstico (Felis silvestris catus).

La princesa Amber y la «gatita Sofía». (11)

Tan solo contamos con dos gatos en toda la serie. El más destacado es nuestra misma princesa Sofía, cuando fue convertida en una linda gatita rosada tras un mal deseo de su hermana Amber. El otro minino fue el de una niña de la aldea, que había sido transformado en una gallina por la brujita Lucinda, hasta que, siguiendo el consejo de Sofía, lo devuelve a su forma original.

Este gato tiene un aspecto más realista. (7)

Y por el otro lado, tenemos a los grandes félidos, todos dentro de la subfamilia Panterinos. Además de por el mayor tamaño, también se diferencian de los otros félidos por su laringe modificada que les da la capacidad de emitir fuertes rugidos. 

Nuestra princesa ha tenido un único encuentro con un gran félido y fue con el «jaguar de jade», una bestia del sudeste asiático que robaba riquezas y las guardaba celosamente en una cueva (como si se creyera el dragón Smaug).

¡Un momento! ¡Un jaguar en el sudeste asiático! ¿Desde cuándo narices hay jaguares en Asia? El jaguar (Panthera onca) vive en las selvas tropicales de Sudamérica, y encontrarnos uno en plena China sería tan normal como ver un canguro comiendo bellotas en plena dehesa extremeña. No tiene ningún sentido.

El feroz y legendario jaguar de jade. (12)
Suerte que Sofía es más lista y puede razonar con los animales. (12)

Lo más probable, es que el tal «jaguar de jade» sea en realidad un leopardo (Panthera pardus), que es muy semejante al jaguar y sí que vive en Asia. Si tenéis alguna sugerencia, estaré encantado de discutirlo.

En la próxima entrega de La Fauna de «La Princesa Sofía», continuaremos analizando el resto de los mamíferos que hacen su aparición en la serie. ¡No os lo perdáis!


Referencias: (1) Un conejo de concurso; (2) Érase una vez una princesa; (3) Buscando a Clover; (4) Qué suenen los trolls; (5) El examen de princesa; (6) Las Flores; (7) La brujita; (8) Dos princesas y un bebé; (9) Fiestas en Encantia; (10) La gran fiesta de pijamas; (11) El pozo de los deseos; (12) Princesas al rescate.


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